José Everardo López Córdova es el presidente en turno del Congreso del Estado de
Sonora. Un joven diputado de extracción panista y escasos 27 años de edad que se autodefine todavía como "verde"
en estas cuestiones de la política y actividades conexas, a
pesar de tener ya poco más de siete años en el servicio público, habiendo ocupado en
este gobierno de la alternancia, la titularidad del Instituto Sonorense de la
Juventud, cargo del cual se separó para contender por la
diputación local de su terruño, el distrito I con cabecera en San Luis Río Colorado, y que ganó, según menciona, con el voto y la confianza de más de 22 mil sanluisinos que confiaron en su proyecto de
buscar " nuevas formas, nuevas ideas para hacer las cosas".
"Llegué ilusionado, aunque desconcertado, sobre qué iba a hacer al frente del Congreso, pero con muchas ganas
de trabajar en conjunto y aprender" afirma Everardo. No tardó mucho para empezar a
visualizarlo, pues a pocos días de llegar a la presidencia,
recibió al titular del Poder
Ejecutivo, Guillermo Padrés Elías, en la entrega del tercer informe de gobierno, referente
al estado que guarda la administración pública estatal y sus dependencias.
Agradecido
por la distinción de compartir "el
pan" y algo más..., con los comunicadores y
periodistas del grupo Contrapunto 10, dijo ser el más joven de los diputados de esta legislatura y se proclamó orgulloso egresado de la Universidad de Sonora, búho de corazón, por lo que se sintió complacido de haber estado
también como representante del poder
legislativo en la ceremonia del 70 aniversario de su Alma Mater, la casa de
todos los sonorenses, en la cual coincidieron los tres poderes del estado este
pasado 12 de octubre.
Una
charla en la que se platicó sobre lo adecuado que sería impulsar el servicio civil de carrera; el tremendo rezago
legislativo que encontraron en el Congreso, con más
de 240 iniciativas o puntos de acuerdo -algunas con más de 24 años en la congeladora-, y que
está siendo analizado por las
fracciones parlamentarias para su depuración y decidir cuáles son todavía rescatables, aunque las iniciativas ciudadanas siguen su curso en las comisiones para su
dictámen correspondiente.
Con una
visión optimista sobre el cómo deben ser las relaciones entre las diversas fracciones
parlamentarias, manifiesta que el Congreso va bien, ya que existe buena
comunicación, excelente disposición y ánimo para el trabajo a
desarrollar ya que no quieren cometer los errores de la pasada legislatura,
desean llegar a acuerdos, y tomar decisiones y determinaciones en conjunto.
No podía quedar de lado el comentario sobre la necesidad de
privilegiar el diálogo y generar mayor confianza
entre los grupos parlamentarios, para que el ciudadano mejore la percepción que tiene de que los legisladores "se la llevan agarrados del
chongo", o cómo "pierden piso" al
llegar al puesto; como tampoco la obligatoriedad de regresar a sus distritos y
cumplirle a la gente en las labores de gestión.
Por su parte, manifiesta que va a estar en contacto con la ciudadanía de su distrito a través
de oficinas móviles que trabajarán con calendario previo de
actividades, dinámicas, e interacciones que
realmente ayuden a gestionar apoyos pero no basándose
en el asistencialismo, que a la larga no ayuda a mejorar la calidad de vida de
las comunidades.
Convencido
de que trabajar es la fórmula para que el diputado se
vea bien, acepta también el cuestionamiento de que
hay mucho trabajo improductivo en el Congreso, así
como el hecho de que deben generar una imagen de legalidad, no sólo de que saben ponerse de acuerdo, porque el diálogo no garantiza trabajo, ni continuidad, ni unidad para
los sonorenses y, además, como bien lo dice la
sabiduría popular, también hay diálogos de sordos.
A la pregunta
obligada, de si "le late" la alcaldía
de San Luis Río Colorado, responde enfáticamente: "Tengo dos caminos ante mí, pero mi trabajo y mis resultados lo decidirán. Una cosa es lo
que yo quiera, y otra que me alcance para ello".
¿Una pluri entonces? preguntamos.
"La pluri es para personas que trabajaron toda su vida en el partido y que
aportaron mucho al mismo", afirma convencido.
Y al
escucharlo sólo acatamos a pensar que el
camino de la política es sinuoso e impredecible
y con muchas "piedritas" resbalosas en el camino. Por ahora, hay que
ver el juego desde las gradas porque como dijo el gran Yogi Berra: "esto
no se acaba hasta que se acaba".
José Robero Morales
termomx@gmail.com
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